Pelearé hasta el último segundo y mi epitafio será: "No estoy de acuerdo"

Los de atrás vienen conmigo

miércoles, 12 de mayo de 2010

Yo saludo su desconfío no matrimoniado; y observad que el Destino arregló la cosas de forma que ninguno de ellos -aunque no fueran religiosos- tuvo que romper, después de todo, sus lazos confesionales con el pasado. Yo, sin embargo, no fui educado como católico ni como judío. Era ambas cosas, y ninguna; un judeotólico anónimo, un a-ca-jú, un popurrí, un cachorro mestizo. Estaba -¿como se dice ahora? -atomizado. Sí señor: una auténtica bomba de Bombay.
Bastardo: me gusta como suena la palabra. Baas, caca maloliente. Tardo, zoquete, de lenta comprensión. Ergo bastardo, tonto de mierda; como yo por ejemplo.




Moraes Zogoiby, en la pág. 121. "El último suspiro del Moro", SALMAN RUSHDIE. Es complicado y un poco NO-ACORDE para presentarlo en teatro, en primera persona. Para explicarlo. Pero igual, no deja de gustarme ese párrafo ♥

No hay comentarios:

Publicar un comentario